Nuestro compositor más internacional ha dado su música a la nueva película de Emilio Martínez Lázaro, que versa sobre, agárrense: la guerra civil española. (Si uno no hubiera ido al colegio, pensaría que jamás existió ningún otro acontecimiento relevante en nuestra historia). Esta nueva composición de Roque Baños, intensa en dramatismo y sentimiento, nos llega cargada de aciertos, lo que no impide que sea censurable en algunos sentidos.
El bellísimo tema principal –sin duda el mayor acierto de la obra- desborda poesía y profundidad. También son remarcables excelentes pasajes de piano como Regalo de cumpleaños, o los arriesgados acordes que oímos en Las octavillas y las caídas; sin embargo la faceta meramente incidental, resulta insuficiente y carente de garra, deja cierta sensación de indiferencia.
Esta lírica partitura no aburre, pues los cortes son breves y de conveniente diversidad; pero ya sabemos que a veces, las exigencias del guión o simplemente las pautas marcadas por el director, supeditan la creatividad del artista, y ese condicionante puede jugar en contra de los buenos resultados. Seguramente por ello algunos melancólicos pasajes de violín como Adelina, rozan la cursilería a causa de su excesiva melosidad.
Nos quedamos con anteriores creaciones de Roque Baños, más inquietantes como El Maquinista, o poderosas como Alatriste. Las 13 Rosas no carece de interés, pero le falta esa chispa que convierte un buen trabajo en obra maestra.
M.M.M. |