THE CURIOUS CASE OF BENJAMIN BUTTON |
| Compositor: |
ALEXANDRE DESPLAT |
| Sello / Ref. |
Concord Records CRE-31231-02
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| Duración: |
59 minutos |
| Año: |
2008 |
Lista de cortes: |
1. |
"My name is Benjamin" |
2. |
We Shall Walk Through the Streets of the City |
3. |
"Some days I feel different" |
4. |
Ostrich Walk |
5. |
"How old are you?" |
6. |
That's How Rhythm Was Born |
7. |
"When was the last time you had a woman?" |
8. |
Freight Train Blues |
9. |
Basin Street Blues |
10. |
"Thanksgiving, 1930" |
11. |
If I Could Be With You (One Hour Tonight) |
12. |
"What's your secret?" |
13. |
Chanson Sur Staline |
14. |
"A date which will live in infamy..." |
15. |
Arabeske for Piano in C Major Op. 18 |
16. |
"Coming home" |
17. |
Out of Nowhere |
18. |
Dear Old Southland |
19. |
"Defined by opportunities" |
20. |
Skokiaan |
21. |
"Things were becoming different for me..." |
22. |
My Prayer |
23. |
Bethena (A Concert Waltz) |
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Es complicado encontrar obras aisladas que despunten dentro de la asepsia imperante en el actual panorama de la música de cine, pero aún más inusual es encararse a perlas cuya riqueza es capaz de sorprender y desconcertar duplicando así el placer de su descubrimiento, tanto por su calidad intrínseca como por el vivificante desafío que supone su asimilación y comprensión. Porque a la hora de forjar su encantador bosquejo musical para The Curious Case of Benjamin Button, Desplat no se conforma con ofrecernos su refinado clasicismo y sus motivos rebosantes de sensibilidad, sino que edifica una consistente estructura artística de una coherencia y solidez propia de otros tiempos. |
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Predomina una atmósfera serena y sugerente, de moderado sentimiento y suaves texturas, donde también hay sitio para cortes ágiles llenos de energía y extravagancia. Pero aún sin dejar de navegar por las calmadas aguas en las que el galo se desenvuelve con tanta soltura, ni renunciar en ningún momento a la emotividad como eje conductor, impresiona la compleja multiplicidad de registros de una composición en cuyo ambiguo mensaje no faltan reflejos de templado misticismo, momentos de ternura casi infantil e incluso un sutil sentido del humor. |
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No obstante, y por encima de todas estas excelencias, el principal incentivo de tan virtuosa partitura y la peculiaridad que realmente marca la diferencia con casi todas las producciones contemporáneas es que, como si de una sinfonía se tratase, goza de vida y espíritu propios, crece y evoluciona tanto al compás del film como por sí misma; y cuando terminamos la escucha somos conscientes de que, musicalmente hablando, hemos asistido a la completa narración de una historia. |
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Desplat no es John Barry, y quizá no aborde el lirismo con la desgarrada pasión característica del veterano autor británico, pero no hay posibles reproches para esta pieza subyugante en la que la profusión de matices complementa la deliberada simplicidad de las melodías. Si hasta ahora hemos observado la trayectoria de este prometedor músico con interés, cautela y crecientes expectativas, esta vez podemos abandonarnos sin condiciones a las maravillas de la obra maestra que nos ofrece. Un trabajo impecable como este debería haber sido recompensado, más allá de toda duda, con la dorada estatuilla del 2009, pero ya sabemos que lo que Hollywood premia no suele ser la calidad. |
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El segundo compacto que la edición incluye no parece tener más función que engrosar el coste de la misma y, quizá, satisfacer las exigencias de los coleccionistas más incondicionales. Por lo que a nosotros respecta, nada tenemos que comentar sobre tan innecesaria recopilación de diálogos y canciones ambientales. |
M.M.M. |
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| Valoración: |
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