CASINO ROYALE |
(Casino Royale, 2006) |
|
Compositor: |
DAVID ARNOLD |
Lista de cortes: |
26. |
License: 2 Kills (02:38) |
27. |
Reveal LeChiffre (01:25) |
28. |
Mongoose vs. Snake (01:16) |
29. |
Bombers Away (00:27) |
30. |
Push Them Overboard (00:27) |
31. |
Bedside Computer (00:41) |
32. |
Beep Beep Beep Bang (00:37) |
33. |
Inhaler (00:27) |
34. |
Brother from Langley (01:41) |
35. |
Prelude to a Beating (01:17) |
36. |
Coming Round (01:11) |
37. |
I'm Yours (01:04) |
38. |
Running to the Elevator (00:28) |
|
Letra: YOU KNOW MY NAME (Escrita por David Arnold y Chris Cornell) |
|
If you take a life, do you know what you'll give
Odds are, you won't like what it is
When the storm arrives, would you be seen with me
By the merciless eyes I've deceived
I've seen angels fall from blinding heights
But you yourself are nothing so divine
Just next in line
Arm yourself because no-one else here will save you
The odds will betray you
And I will replace you
You can't deny the prize; it may never fulfill you
It longs to kill you
Are you willing to die
The coldest blood runs through my veins
You know my name
If you come inside, things will not be the same
When you return to my night
If you think you've won
You never saw me change
The game that we have been playing
I've seen diamonds cut through harder men
Than you yourself
but if you must pretend
You may meet your end
Arm yourself because no-one else here will save you
The odds will betray you
And I will replace you
You can't deny the prize; it may never fulfill you
It longs to kill you
Are you willing to die
The coldest blood runs through my veins
Try to hide your hand
Forget how to feel
(Forget how to feel)
Life is gone with just a spin of the wheel
(A spin of the wheel)
Arm yourself because no-one else here will save you
The odds will betray you
And I will replace you
You can't deny the prize; it may never fulfill you
It longs to kill you
Are you willing to die
The coldest blood runs through my veins
You know my name |
|
|
|
PASEO POR EL AMOR Y LA MUERTE
Hasta este momento, cada vez que un intérprete de James Bond era sustituido, se debía a alguna causa de fuerza mayor; el rechazo del público, la caída de la taquilla, la renuncia o avanzada edad del actor… Lo que nadie podía esperar es que, con Pierce Brosnan no solo dispuesto y en plena forma, sino respaldado además por unos excelentes resultados comerciales, la osada y visionaria Barbara Broccoli se jugara el destino de la serie en la más arriesgada de las apuestas, ostentando más agallas de las que nunca tuvo su padre. |
|
|
La temeraria productora, consciente de que los desmadrados excesos cometidos en el título anterior auguraban un desalentador futuro, no solo determinó reconfigurar el perfil del espía decantándose por un actor casi desconocido y de físico peculiar, sino que se atrevió a dar un giro de 180 grados a la serie al revisar la biografía de Bond desde sus orígenes, alterando por completo las directrices imperantes desde siempre en la afianzada memoria histórica de 007. Clásicas presencias como Q o Moneypenny son innecesarias en este nuevo universo, en el que el realismo y la crudeza reemplazan en buena medida al habitual desenfado y al espectáculo gratuito. |
El rejuvenecido Bond del siglo XXI, que solo sabe de la Guerra Fría por los libros de historia, es expeditivo, indisciplinado, arrogante, intuitivo, y poco se preocupa de que agiten o remuevan su Dry Martini. No necesita de alias ni gadgets para alcanzar sus propósitos, ni tampoco se escuda tras el ramplón sentido del humor que a veces exhibían sus predecesores; y aunque tiene experiencia en muchos terrenos, el de los sentimientos no es uno de ellos, lo cual le hará destapar su cara más vulnerable ante aflicciones para él tan desconocidas como el dolor de la traición o la pérdida de un ser querido. |
La reconstrucción musical que requería tan inesperado vuelco recaería una vez más sobre el ya veterano David Arnold, quien enfrentó con pericia los retos planteados por el novedoso escenario. Atrás queda la saturación electrónica, que por fortuna deja paso a un predominio fundamentalmente sinfónico comparable, por su riqueza y complejidad, a El mañana nunca muere. El inexistente uso del tema de James Bond, que por conveniencia de la historia se restringe hasta los créditos finales, no mengua la eficacia de una partitura que reafirma definitivamente el sonido Bond de la nueva era, y a Arnold como su indiscutible y meritorio artífice. |
|
|
Un marcado regusto retro que se aprecia sobre todo en los momentos atmosféricos, otorga a la cinta un aire nostálgico que nos remonta a las primeras entregas de la serie, recordándonos que asistimos a un nuevo comienzo. Pero ya sabemos que la intriga y la acción son las mejores amigas de este compositor, que luce al máximo su talento en cortes como African Rundown o sobre todo el colosal Miami International, con sus 12 minutos de ininterrumpido desenfreno donde incluso hay cabida para desgarradores ritmos a base de guitarra eléctrica; estos cortes violentos, tan coléricos como los actos del protagonista, delimitan la nueva y más ruda dirección que habrá de guiar los pasos de James Bond. |
Por otra parte, el mayor y más comprometido discurso emocional de Casino Royale, exigía también máxima implicación por parte de Arnold, quien demuestra ser capaz de concebir hermosas melodías románticas, sugerentes o hasta trágicas según el caso, pero siempre cercanas al espíritu de un John Barry cuya sombra nunca ha dejado de planear sobre los paisajes musicales de la serie. El piano y los violines alcanzan su más altas cotas de lirismo en bellísimos cortes como Vesper o City of Lovers, adecuadamente destinados a dulcificar la relación entre 007 y su primer amor serio. |
|
El propio Arnold fue también el creador, junto con el vocalista Chris Cornell, de la estupenda canción You Know my Name; un tema potente, duro, ideal para el nuevo ritmo arrollador de la serie y que además también funciona perfectamente en sus traslaciones instrumentales, reforzando diversos momentos del score. Lamentablemente, y pese a las muchas versiones que circularon antes del estreno, la interpretación que oímos en la película nunca ha sido editada, pues en el compacto de la banda sonora ni siquiera se incluye y la del maxisingle se suscribe a una tendencia más rockera. |
|
|
A la de por sí extensa compilación recogida en el compacto, hay que añadir los 13 temas ofrecidos por iTunes para completar así la mayor cobertura musical (oficialmente, al menos) jamás comercializada sobre una banda sonora de 007. |
M.M.M.
|
|
|